miércoles, 11 de noviembre de 2009

VAMPIROS PRIMERA PARTE




Por que no podia faltar en un blog de fantasia los vampiros bueno pues hay mucho acerca de los vampiros y tal ves no logre abarcarlo todo asi que les agradeceria que si saben algo mas lo dejen en los comentarios pero porfavor no olviden de dejar bibliografia como referencia(p.d. los libros de estephani meyer y anee rice no son de estudio son novelas por lo que no se toman como libros de estudio o texto).




Aunque a veces puede parecer que fue Bram Stoker, con Drácula, el creador del vampirismo y del mito del vampiro, los orígenes de esta criatura se remontan a tiempos inmemoriales.
Casi siempre tratamos, por lo tanto, de buscar los orígenes del vampirismo o de los vampiros en la literatura y tal vez no vamos mal encaminados, pero no debamos limitarnos a las obras fantásticas que están inspiradas en ellos.
Los egipcios, los chinos, los babilonios, los griegos o los romanos, entre otras muchas civilizaciones, hablaban ya hace mucho tiempo de criaturas y monstruos que chupaban la sangre.
La palabra vampiro tiene traducción idéntica en multitud de países: vampyr en Serbia, pamgri en Hungría, danag en Filipinas, kosac en croata, upir en ruso y muchísimas más.
El origen etimológico de la palabra "vampiro" es eslavo ( "vampir") y su significado sería algo a medias entre un ser volador, bebedor-succionador de sangre y lobo.
Posteriormente, a través del alemán, el término pasaría al húngaro, aunque no parece introducirse en las lenguas de la Europa Occidental hasta 1730, a causa de un misterioso episodio de histeria colectiva desatado precisamente en Hungría.
Pero remontémonos mas atrás en el tiempo y hagamos un pequeño repaso de la figura del vampiro a lo largo de la historía y su presencia en las diferentes culturas:
En el antiguo Egipto encontramos deidades vampíricas como Srun, caracterizado por aspecto de lobo con largos colmillos, que se alimentaba de los cuerpos de sus víctimas humanas
En la antigua Grecia, existía en su mitología la leyenda de "Lamia'', que era hija del rey oriental Belus y cuyos hijos fueron asesinados por la diosa Hera al conocerse que ''Lamia'' tuvo un romance con Zeus. Para vengarse, ''Lamia'' comenzó a perseguir a todos los niños que se encontraba para extraerles la sangre para alimentarse. Esta leyenda se convirtió en superstición que se transmitía en las zonas rurales de Grecia y que contaba que ''Lamia'' atacaba a todos los viajeros extraviados, seducidos por la belleza de la "chupasangre". Este caso es el más parecido a la concepción histórica de vampiro. También en la mitología griega se encuentra el caso de ''Empusa'', hija de la diosa Hécate, un ser con pies de bronce y monstruoso que podía transformarse en una bella mujer y conquistaba a los hombres para aprovecharse de su sangre. Además en la Hélade existían en sus leyendas las ''striges'', deidades con rostro de mujer y cuerpo de pájaro que absorbían la sangre de los humanos mientras estos dormían. También existía un ser llamado ''Vrycolaka'', que atacaba a su familia después de muerto.
Autores como Virgilio, Plinio, Herodoto, Homero o Aristófanes creían en la existencia de licántropos, además de otros seres espectrales denominados "empusas" - emparentados posteriormente con los "lémures" romanos (espíritus de difuntos) - que adoptaban aspectos diferentes para asesinar niños y alimentarse de su sangre.
En la Roma Clásica, además de los ya mencionados "lémures", se temía también la aparición de Strix, un vampiro volador que sembraba el terror entre los campesinos.
En la antigua china se temía a un vampiro capaz de chupar la sangre de sus víctimas en unos pocos segundos, llamado "Kiang". Además también se tiene conocimiento de un diablo, "Giang Shi", que actuaba de la misma manera.
Haciéndo un considerable salto en el tiempo, en el folclore centroeuropeo, especialmente en Rumania, nos encontramos con que los campesinos sentían un profundo temor ante la siempre intuída presencia del "Strigoi", un repugnante ser con patas de caballo o cabra, que se alimentaba de su sangre mientras dormían.
Todo esto sin olvidar que, según algunas interpretaciones del Antiguo Testamento, el primer vampiro de la historia fue Caín ya que, después de matar a su hermano Abel, renegó de Dios y fue condenado a vagar el resto de sus días, oculto en las tinieblas, lejos de la luz del sol, alimentándose "de cenizas y de sangre". Aunque a veces puede parecer que fue Bram Stoker, con Drácula, el creador del vampirismo y del mito del vampiro, los orígenes de esta criatura se remontan a tiempos inmemoriales.
Casi siempre tratamos, por lo tanto, de buscar los orígenes del vampirismo o de los vampiros en la literatura y tal vez no vamos mal encaminados, pero no debamos limitarnos a las obras fantásticas que están inspiradas en ellos.
Los egipcios, los chinos, los babilonios, los griegos o los romanos, entre otras muchas civilizaciones, hablaban ya hace mucho tiempo de criaturas y monstruos que chupaban la sangre.
La palabra vampiro tiene traducción idéntica en multitud de países: vampyr en Serbia, pamgri en Hungría, danag en Filipinas, kosac en croata, upir en ruso y muchísimas más.
El origen etimológico de la palabra "vampiro" es eslavo ( "vampir") y su significado sería algo a medias entre un ser volador, bebedor-succionador de sangre y lobo.
Posteriormente, a través del alemán, el término pasaría al húngaro, aunque no parece introducirse en las lenguas de la Europa Occidental hasta 1730, a causa de un misterioso episodio de histeria colectiva desatado precisamente en Hungría.
Pero remontémonos mas atrás en el tiempo y hagamos un pequeño repaso de la figura del vampiro a lo largo de la historía y su presencia en las diferentes culturas:
En el antiguo Egipto encontramos deidades vampíricas como Srun, caracterizado por aspecto de lobo con largos colmillos, que se alimentaba de los cuerpos de sus víctimas humanas
En la antigua Grecia, existía en su mitología la leyenda de "Lamia'', que era hija del rey oriental Belus y cuyos hijos fueron asesinados por la diosa Hera al conocerse que ''Lamia'' tuvo un romance con Zeus. Para vengarse, ''Lamia'' comenzó a perseguir a todos los niños que se encontraba para extraerles la sangre para alimentarse. Esta leyenda se convirtió en superstición que se transmitía en las zonas rurales de Grecia y que contaba que ''Lamia'' atacaba a todos los viajeros extraviados, seducidos por la belleza de la "chupasangre". Este caso es el más parecido a la concepción histórica de vampiro. También en la mitología griega se encuentra el caso de ''Empusa'', hija de la diosa Hécate, un ser con pies de bronce y monstruoso que podía transformarse en una bella mujer y conquistaba a los hombres para aprovecharse de su sangre. Además en la Hélade existían en sus leyendas las ''striges'', deidades con rostro de mujer y cuerpo de pájaro que absorbían la sangre de los humanos mientras estos dormían. También existía un ser llamado ''Vrycolaka'', que atacaba a su familia después de muerto.
Autores como Virgilio, Plinio, Herodoto, Homero o Aristófanes creían en la existencia de licántropos, además de otros seres espectrales denominados "empusas" - emparentados posteriormente con los "lémures" romanos (espíritus de difuntos) - que adoptaban aspectos diferentes para asesinar niños y alimentarse de su sangre.
En la Roma Clásica, además de los ya mencionados "lémures", se temía también la aparición de Strix, un vampiro volador que sembraba el terror entre los campesinos.
En la antigua china se temía a un vampiro capaz de chupar la sangre de sus víctimas en unos pocos segundos, llamado "Kiang". Además también se tiene conocimiento de un diablo, "Giang Shi", que actuaba de la misma manera.
Haciéndo un considerable salto en el tiempo, en el folclore centroeuropeo, especialmente en Rumania, nos encontramos con que los campesinos sentían un profundo temor ante la siempre intuída presencia del "Strigoi", un repugnante ser con patas de caballo o cabra, que se alimentaba de su sangre mientras dormían.
Todo esto sin olvidar que, según algunas interpretaciones del Antiguo Testamento, el primer vampiro de la historia fue Caín ya que, después de matar a su hermano Abel, renegó de Dios y fue condenado a vagar el resto de sus días, oculto en las tinieblas, lejos de la luz del sol, alimentándose "de cenizas y de sangre".


VAMPIROS en el FOLKLORE EUROPEO:

Los vampíros existen en el folklore de diferentes culturas del mundo desde hace cientos de años,
en China son monstruos de piel verde y cabello rosado y brillantes ojos rojos, en Grecia, mujeres
cuya parte inferior del cuerpo es una serpiente alada llamadas Lamia; en Japón son los Koomari,
La cabeza Penanggalang en Malasia. Estos son tan sólo los diversos 'vampíros' de las culturas
orientales, o lo que para estas cultura es un vampíro.

El vampíro al que conocemos e identificamos como tal, tiene sus orígenes en el folklore y
misticísmo de Europa del Este, sin embargo, estos mítos fueron influenciados por los mítos
chinos y de otras partes de oriente, durante intercambios de materias con ellos, de este modo
se propagaron dichos mitos en la cultura de Europa del Este, principalmente en el área
correspondiente a los Balcánes en las culturas eslávas y las montañas Carpathian en Hungría y
Transilvania, lo que ahora se conoce como Rumania.
Los pueblos de estas regiones, creían que existían personas maldecidas que, una vez muertos, salían de sus tumbas durante la noche, para alimentarse de sus propios familiares o cualquier transeunte de la localidad, su alimento por supuesto, era la sangre de los vivos.

Para librarse de los vampíros, la gente recurría a todo lo que estuviera a su disposición, se decía que el ajo los auyentaba y por ello colgaban racímos de ajo sobre las puertas, besaban un ajo antes de dormir y colgaban cruces sobre sus cabeceras. También decidían entretenerlos dejando caer sobre sus tumbas puñados de pequeñas semillas, pues se decía que tenían una fasinación por contar objetos, así que pasaban la noche contando las semillas y para cuando terminaban, el sol comenzaba a salir y debían regresar a sus tumbas.

Estos son algunos detalles de manera general en que coinciden los distintos mitos europeos, sin embargo, cada región tiene sus propias formas y variedades de vampíros. En la región de los Eslávos se dá una de las mayores fuentes de mitos sobre los vampíros; ellos categorizaban a un futuro vampíro de acuerdo a ciertas características, por ejemplo, se decía que aquellos nacidos
con una membrana o cola, es decir, cualquier deformidad física o bien nacido con un diente, dado que los recién nacidos no tienen dientes; también aquellos concebidos en determinados días y horas, aquellos que sufrieran una muerte violenta o fueran excomulgados, estaban condenados a ser vampíros y para evitar sus acéchos se les dejaban caer puñados de semillas para entretenerlos contando o bien atravesar el cuerpo con estácas para evitar que salieran de la tumba.
Los pueblos de estas regiones, creían que existían personas maldecidas que, una vez muertos, salían de sus tumbas durante la noche, para alimentarse de sus propios familiares o cualquier transeunte de la localidad, su alimento por supuesto, era la sangre de los vivos.

Para librarse de los vampíros, la gente recurría a todo lo que estuviera a su disposición, se decía que el ajo los auyentaba y por ello colgaban racímos de ajo sobre las puertas, besaban un ajo antes de dormir y colgaban cruces sobre sus cabeceras. También decidían entretenerlos dejando caer sobre sus tumbas puñados de pequeñas semillas, pues se decía que tenían una fasinación por contar objetos, así que pasaban la noche contando las semillas y para cuando terminaban, el sol comenzaba a salir y debían regresar a sus tumbas.

Estos son algunos detalles de manera general en que coinciden los distintos mitos europeos, sin embargo, cada región tiene sus propias formas y variedades de vampíros. En la región de los Eslávos se dá una de las mayores fuentes de mitos sobre los vampíros; ellos categorizaban a un futuro vampíro de acuerdo a ciertas características, por ejemplo, se decía que aquellos nacidos
con una membrana o cola, es decir, cualquier deformidad física o bien nacido con un diente, dado que los recién nacidos no tienen dientes; también aquellos concebidos en determinados días y horas, aquellos que sufrieran una muerte violenta o fueran excomulgados, estaban condenados a ser vampíros y para evitar sus acéchos se les dejaban caer puñados de semillas para entretenerlos contando o bien atravesar el cuerpo con estácas para evitar que salieran de la tumba.

Para destruírlos podían enterrársele estacas en el pecho, decapitarlos y colocar la cabeza entre las piernas, rociar la tumba con agua bendita e incluso exorcismos.

El "Vampíro" más famoso del mundo por obra de la literatura de horror, proviene de Rumania y allí, los mítos son variantes de los vampíros eslovacos, a estos se les llamaba Strigoi, los cuales se dividían en 2 tipos, los Vii y los Mort, los Vii eran brujas y hechiceros que eran capaces de separar sus almas de su cuerpos para encontrarse con las almas de otros Vii o Mort, algo similar al pandemonium de las brujas inglésas. Al morir estás brujas y hechiceros, eran llamados Mort y volvían de la muerte para alimentarse de la sangre de los vivos hasta vaciarlos, eran entonces Vampíros.

Según el mito rumano, una persona se convertiría en vampíro si nacía con alguna deformidad física, si había sido mordido por un vampíro hasta casi vaciarlo de sangre, al morir se transformaría en uno de ellos, los que habían sido maldecidos por uno y aquellos que jugaban con la magia negra corrían el riesgo de ser un vampíro al morir, igualmente aquellos que sufrieran de una muerte no natural, serían vampiros.


Una de las formas que se tenían para detectar a los vampíros en la antigua Transilvania y sus alrededores más cercanos, antes de que estos despertaran y atacaran a la población, era llevar un caballo previamente bendecido por el sacerdote local, al cementerio y allí hacerlo pasar por sobre las tumbas, aquella tumba por la que el caballo se rehusara a pasar era donde descansaba un vampíro y procedían a enterrar una enorme estaca de madera en la tumba, en el área donde se intuyera estaba el pecho o el cuello.


Vampiros Eslavos

El pueblo eslavo incluye a la mayoría de los europeos del este de Rusia a Bulgaria, Serbia a Polonia tienen el folklore y leyendas de vampiros más ricas del mundo. Los eslavos vinieron del norte del Mar Negro y estaban muy asociados con los Iraníes. Antes del siglo VIII dC migraron al norte y al oeste, a donde están ahora. La Cristianización empezó casi cuando llegaron a sus nuevas tierras. Pero a través del siglo IX y X la Iglesia Ortodoxa oriental y la Iglesia Católica Apostólica Romana luchaban entre ellas por la supremacía. Formalmente se separaron en el año 1054 dC, y los búlgaros, rusos y serbios quedaron como ortodoxos, mientras que los polacos, checos y croatas se hicieron católicos. Esta separación causó una gran diferencia en la cultura vampírica – la Iglesia Católica creía que los cuerpos que no se corrompían eran santos, mientras los ortodoxos creían que eran vampiros.

El origen de los mitos vampíricos eslavos se desarrolló en el siglo IX como resultado del conflicto entre el paganismo pre-cristiano y el cristianismo. El cristianismo venció, quedando los vampiros y otras creencias paganas sobreviviendo en el folklore.

Hay diferentes tipos de Strigoi: los Strigoi Vii son brijas vivas que se volverán vampiros al morir. Pueden hacer que sus almas salgan de noche para encontrarse con otras brujas o con Strigoi Mort que son vampiros muertos. Los Strigoi Mort son los cuerpos reanimados que vuelven para beber la sangre de familiares, ganado y vecinos.

Una persona nacida con una membrana, una cola o fuera de matrimonio, o alguien que muriera de forma no natural, o muriera antes de ser bautizado, estaba condenado a volverse un vampiro. También lo estaba el séptimo hijo del mismo sexo en una familia, el hijo de una mujer embarazada que no comía sal o cuidada por un vampiro, o bruja. Y naturalmente, ser mordido por el vampiro, significaba la certera condenación a una existencia vampírica tras la muerte.

El Vircolac a quien a veces se menciona en el folklore estaba más cercanamente relacionado a un lobo mitológico que podía devorar el sol y la luna y luego fue conectado más con los hombres lobos que con los vampiros. La persona afectada de licantropía podía convertirse en perro, cerdo o lobo.

El vampiro usualmente recién era detectado cuando atacaba a su familia o ganado, o lanzaba cosas alrededor de la casa. Se creía que los vampiros, al igual que las brujas, eran muy activos durante la víspera del Día de San Jorge (22 de abril en el calendario Juliano, 4 de mayo en el Gregoriano), la noche en se suponía que todas las formas de mal circulaban al máximo. El día de San Jorge aun se celebra en Europa.

Se podía descubrir a un vampiro en su tumba buscando de agujeros en la tierra, un cadáver no descompuesto con una cara roja, o que tuviera un pie en la esquina del ataúd. A los vampiros vivos se los desenmascaraba distribuyendo ajo en la iglesia, y fijándose en quién no lo comía.

Se abrían frecuentemente las tumbas tres años después de la muerte de un niño, cinco después de la muerte de un joven o siete años después de la muerte de un adulto para descubrir el vampirismo.

Algunas pruebas de que un vampiro estaba rondando la vecindad: Muerte de ganado bovino, ovino,
muerte de parientes, vecinos, cuerpos exhumados que estaban en un estado como de vida con crecimiento de las uñas o el pelo, o si el cuerpo estaba hinchado como un tambor, o si había sangre en la boca y el cuerpo tenía una complexión saludable. Los vampiros podían ser destruidos con estacas, la decapitación (los Kashubs ponían la cabeza entre los pies), fuego, repitiendo el servicio funerario, agua bendita




Rumania

Rumania está rodeada por países eslavos, lo que hace que no sea sorprendente que sus vampiros son variantes del vampiro eslavo. Se los llama Strigoi, basado en el término romano strix para búho, que también pasó a significar demonio o bruja.

Hay diferentes tipos de Strigoi: los Strigoi Vii son brijas vivas que se volverán vampiros al morir. Pueden hacer que sus almas salgan de noche para encontrarse con otras brujas o con Strigoi Mort que son vampiros muertos. Los Strigoi Mort son los cuerpos reanimados que vuelven para beber la sangre de familiares, ganado y vecinos.

Una persona nacida con una membrana, una cola o fuera de matrimonio, o alguien que muriera de forma no natural, o muriera antes de ser bautizado, estaba condenado a volverse un vampiro. También lo estaba el séptimo hijo del mismo sexo en una familia, el hijo de una mujer embarazada que no comía sal o cuidada por un vampiro, o bruja. Y naturalmente, ser mordido por el vampiro, significaba la certera condenación a una existencia vampírica tras la muerte.

El Vircolac a quien a veces se menciona en el folklore estaba más cercanamente relacionado a un lobo mitológico que podía devorar el sol y la luna y luego fue conectado más con los hombres lobos que con los vampiros. La persona afectada de licantropía podía convertirse en perro, cerdo o lobo.

El vampiro usualmente recién era detectado cuando atacaba a su familia o ganado, o lanzaba cosas alrededor de la casa. Se creía que los vampiros, al igual que las brujas, eran muy activos durante la víspera del Día de San Jorge (22 de abril en el calendario Juliano, 4 de mayo en el Gregoriano), la noche en se suponía que todas las formas de mal circulaban al máximo. El día de San Jorge aun se celebra en Europa.

Se podía descubrir a un vampiro en su tumba buscando de agujeros en la tierra, un cadáver no descompuesto con una cara roja, o que tuviera un pie en la esquina del ataúd. A los vampiros vivos se los desenmascaraba distribuyendo ajo en la iglesia, y fijándose en quién no lo comía.

Se abrían frecuentemente las tumbas tres años después de la muerte de un niño, cinco después de la muerte de un joven o siete años después de la muerte de un adulto para descubrir el vampirismo.

Algunas medidas para prevenir que una persona se convirtiera en vampiro: quitar la membrana del recién nacido y destruirla antes de que el bebé pudiera comerse nada de ella, la preparación cuidadosa de los cuerpos muertos, incluyendo la prevención de que animales pasaran por arriba del cuerpo, poner una rama espinosa de rosa salvaje en la tumba, y poner ajo en las ventanas y frotarlo en el ganado, especialmente en los días de San Jorge y San Andrés.

Para destruir a un vampiro, se atravesaba el cuerpo con una estaca, y luego se lo decapitaba, para después ponerle ajo en la boca. En el siglo XIX la gente disparaba una bala a través del ataúd. En casos de resistencia, el cuerpo era descuartizado y se quemaban los pedazos, se los mezclaba con agua, y se los daba a los miembros de la familia como cura.Los Gitanos y los vampiros

Incluso hoy en día, los gitanos aparecen frecuentemente en la literatura y cine vampírico, sin duda debido a la influencia del libro “Drácula” de Bram Stoker, en donde los gitanos Szgany servían a Drácula, transportaban sus cajas de tierra y lo cuidaban.

En realidad, los gitanos se originaron como tribus nómadas en el norte de India, pero obtuvieron su nombre de la antigua creencia de que venían de Egipto. Para el año 1000 dC comenzaron a esparcirse hacia el oeste y se establecieron en Turquía por un tiempo, incorporando muchas palabras turcas a su idioma Romany.

Para el siglo XIV estaban en los Balcanes, y dos siglos después ya se habían esparcido por toda Europa. Los gitanos llegaron a Rumania poco tiempo antes del nacimiento de Vlad Drácula en 1431.

Su religión es compleja y varía entre las tribus, pero tienen un dios llamado O Del, además del concepto de las fuerzas del Bien y el Mal y una fuerte relación y lealtad a los parientes muertos. Creían que el alma del muerto entraba en un mundo similar al nuestro, excepto que allí no hay muerte. El alma se quedaba cerca del cuerpo y a veces quería regresar. Los mitos gitanos de los muertos vivos se agregaron y enriquecieron la mitología vampírica de Hungría, Rumania y los países eslavos.

El antiguo hogar de los gitanos, la India, tuene muchas figuras vampíricas míticas. El Bhuta es el alma de un hombre que muere antes de su tiempo. Merodeaba animando cuerpos muertos de noche y atacaba a los vivos como un ghoul. En el norte de la India se podía encontrar al brahmaparusha, una criatura cuasi-vampírica con un cuerpo rodeado de intestinos y una calavera de la que bebía sangre.

El vampiro Indio más famoso es Kali que tenía colmillos, usaba un collar de cadáveres o calaveras y tenía cuatro brazos. Sus templos se hallaban cerca de los crematorios. Ella y la diosa Durga combatieron al demonio Raktabija que podía reproducirse a si mismo de cada gota de sangre derramada. Kali bebió toda su sangre para que nada se derramara, y así ganó la batalla y mató a Raktabija.

Sara o la Diosa Negra es la forma en que Kali sobrevivió entre los gitanos. Ellos creen que las tres Marías del Nuevo Testamento fueron a Francia y bautizaron a una gitana llamada Sara. Aun tienen una ceremonia cada 24 de Mayo en la aldea francesa donde se supone que esto sucedió. Un vampiro gitano se llamaba mullo (uno que murió). Se creía que este vampiro regresaba para hacer
cosas maliciosas y /o beber la sangre de una persona (usualmente un pariente que había causado su muerte, o no había hecho bien la ceremonia funeraria, o que conservaba las posesiones del muerto en lugar de destruirlas como era apropiado.)

Las vampiras podían volver y tener una vida normal e incluso casarse, pero dejaban a sus esposos exhaustos. Se creía que cualquiera que tuviera apariencia horrible, le faltara un dedo, o tenía apéndices animales, etc. era vampiro. Incluso las plantas o los perros, los gatos o los animales de la granja podían convertirse en vampiros. Las calabazas o los melones que se mantenían
demasiado en la casa comenzaban a moverse, hacer ruidos o a mostrar sangre.




Para librarse de un vampiro, la gente contrataba a un dhampiro (el hijo de un vampiro y su viuda) para que detectara al vampiro. Para alejar a los vampiros, los gitanos clavaban clavos de acero o hierro en el corazón del cadáver y ponían pedazos de acero en su boca, sobre los ojos y oídos y entre los dedos en el momento del entierro. También ponían madera espinosa en la media del
cadáver o clavaban una estaca de madera espinosa a través de las piernas. Otras medidas eran clavar estacas en la tumba, dejar caer agua hirviendo sobre ella, decapitar al cadáver, o quemarlo.

A pesar de la disrupción de las vidas de los gitanos por los varios regímenes comunistas de Europa oriental, ellos retienen aun mucho de su cultura. En 1992 un nuevo rey de los gitanos fue elegido en Bistritz, Rumania.




y bueno es asi como doy por cerrada esta parte del tema es un tema real mente extenso que aun no termina pues falta hacer incapie en muchas otras culturas que tambien tienen en su folklore a los vampiros y me gustaria ver con mas detenimento




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